Goles son amores 7. Por Juan Botana

Goles son amores 7. Por Juan Botana

Messí ganó el clásico de Miami frente a Orlando City por 3 a 2. Y digo Messi por que hizo dos goles y ya lleva cinco en tres partidos en a Leagues Cup. El otro tanto lo hizo Josef Martínez, el nueve goleador que tiene Las Garzas y que todos esperan que potencie su juego teniendo al lado al mejor del mundo. Y para que vean lo caliente que fue el Clásico del Sol en los Estados Unidos, Lionel fue amonestado por pegarle una patada de atrás a Willer Cartagena. Nada que ver con los que se juegan en la Argentina, como River-Boca, San Lorenzo. Huracán, Independiente-Racing, Central-Newell´s o Banfield-Lanús, donde rara vez se pega una patada. O como se picó Nacional-Boca en Montevideo por la Copa Libertadores de América con represión policial y todo a los hinchas de Boca a la entrada del estadio Gran Parque Central y antes los barras de Nacional fueron a buscar a los de Boca con palos y piedras. Cosa que en Miami no pasa. Van estrellas de la música, el clima es familiar, va la familia de Messi y hasta los chicos festejan con su papá en la cancha a los abrazos con Leo. Y quizás artistas argentinos como María Becerra, Nicki Nicole y Duki se quedaron con las ganas de telonear el partido. O Diego Torres y los Montaner con Ricardo, Mau y Ricky, esta vez no pudieron ir. O alguna estrella del básquet o del beisbol norteamericano. Porque al Inter Miami le dicen Las Garzas y es normal que a los equipos los llamen por sus apodos como en el beisbol en Estados Unidos, México o Cuba. Y en la Argentina sólo se usan para nombrar a un cuadro de manera despectiva. Y de manera despectiva dicen que fue corto el triunfo de River a otro Inter, pero de Porto Alegre en el estadio Monumental por los octavos de final de la Comembol Libertadores Brigdgestone, cuando seguramente fue mucho más importante que este encuentro por dieciseisavos de final por la Leagues Cup, donde juegan equipos de México y Estados Unidos de un nivel similar al de la Primera Nacional de acá. Pero la llegada de Messi a la MLS la dimensiona a escala mundial. Y ahora los canales de deportes de la televisión argentina desde que está Messi en Miami se instalaron allá. Para transmitir cada novedad del Inter Miami. Y así nos enteramos que el español Jordi Alba, el paraguayo Diego Gómez y el argentino Facundo Farías fueron contratados también para jugar junto a Lionel Messi y Sergio Busquets en el Inter Miami. Y la franquicia deportiva de David Beckham y Jorge Mas y quién sabe cuantos accionistas más, no para de llevar jugadores para potenciar una liga, que cada vez es menos emergente y se consolida para retiro o últimos años de carrera de estrellas del fútbol mundial. Compitiendo con la árabe donde juegan Ronaldo, Benzema, Mahrez, Mané, Firmino, Koulibaly, Fofana, Milinkovic, Savic y diregen Gerrard y Bilic. Y muy pronto se está armando otra liga en Qatar, que se quiere llevar o ya contrató a Nicolás De la Cruz, el uruguayo figura del River campeón. Y los comentaristas del fútbol argentino se la pasan hablando de Messi en Miami y de las llegadas de Edinson Cavani a Boca y de Manuel Lanzini a River. Y hacen caso omiso a todos los que se van en cada mercado de pases a jugar al exterior. Vázquez (Boca), Retegui (Tigre), Vegetti (Belgrano), Veliz (Rosario Central), Farías (Colón), por citar solo a los mayores goleadores del fútbol argentino de la Liga Profesional. Pero Gerardo Martino, director técnico del Inter Miami, que ya dirigió a Messi en el Barcelona y en la selección Argentina y que ambos son hinchas de Newell´s, no tiene ese problema. Es más se llevó a Farías para allá. Él o el dinero de los árabes que aportan para los jugadores franquicia del Inter Miami. O los derechos por la exclusividad de los partidos cobrados por Apple TV. O simplemente la luz de la estrella de Messi que todo lo ilumina. Y ya se palpita el próximo encuentro de Las Garzas con el FC Dallas en el Stadium de Florida. Y otra vez todos se preguntan a que personaje de Marvel imito Messi esta vez para festejar un gol en complicidad con sus hijos. Y mientras nosotros le mandamos a Messi a Norteamérica para que entretenga y promocione el fútbol para el campeonato estadounidense-mexicano de la Leagues Cup, ellos nos mandan a Luis Miguel y a Taylor Swift. Y después calcularán a qué actividad sísmica se moverá el Movistar Arena y el estadio de River durante los conciertos. O le pondrán una cámara personal a Leo para seguirlo a todos lados como hicieron con el belga Youri Tielemans en el amistoso del Aston Villa con el Newcastle United, también en los Estados Unidos. Y esperemos que más chicos como Manuel, que padece un problema de crecimiento similar al que tuvo Leo, puedan ir a verlo a Messi a Miami o viajen desde Honduras, Puerto Rico o El Salvador, porque desde acá va a ser difícil con el dólar a $560 y nos conformemos con verlo en los noticieros y redes o en tenerlo en el celu en alguna aplicación.

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