Candidaturas políticas 13. Por Juan Botana

Candidaturas políticas 13. Por Juan Botana

Parece ser que el financiamiento de la política es el tema de hoy. Abren una investigación contra Javier Milei por vender cargos en sus listas de La Libertad Avanza. Parece que el economista Carlos Maslatón y el falso ingeniero Juan Carlos Blumberg fueron víctimas de esto. Lo que no entiendo qué es lo que los sorprende de alguien que quiere o quería vender órganos, armas, etc. Cosas a mí entender mucho más graves. Los conservadores lo hacían hace más de 100 años. Pero después llegaron los radicales y más tarde los peronistas y el lugar que ocupa un candidato en la lista de un frente o partido político un poco se democratizó. Y no tiene que ver con la plata en efectivo que tengas, sino con la posición de poder que hayas podido alcanzar. En algunos partidos lo decide el presidente o la vicepresidenta, como es el caso del candidato a presidente Massa en Unión por la Patria (ex Frente de Todos). Aunque en su famosa unidad tuvieron un descuido y se olvidaron de Grabois. Y para financiarse usarán plata del ANSES o tocarán las reservas. Patricia Bullrich y Larreta u Horacio -como quiere que lo llamen- y para eso paga afiches, periodistas, empleados y trols, decidirán en las PASO quién será el candidato o candidata a presidente por Juntos por el Cambio. Con la diferencia que Horacio tiene la caja de la Ciudad para comprar periodistas, avisos, funcionarios, encuestadores, favorecer a algún que otro empresario inmobiliario, hacer negocios con amigos, arreglar las mismas veredas varias veces, etc. Y Patricia tendrá la que le preste Macri o la que consiga con su Fundación, en la que dicen les cobra el cubierto a los invitados para escuchar sus propuestas. La precandidatura de Milei por La Libertad Avanza ya sabemos cómo. Esto sumado a la que consigue por sus conferencias o charlas y apariciones en los canales de TV al estilo Ricardo Fort. Schiaretti por Hacemos por nuestro país, supongo, que derivará fondos de su amada Córdoba o recibirá plata de empresarios que facturan en blanco o en negro que confíen en él. Los que no tienen cargos o no cobran impuestos la tienen más difícil. Moreno por Principios y Valores se jactaba en el programa de Rolando Graña en América, que iba a ser su campaña con la plata que le iba a dar el conductor. Pero está claro que esa era una humorada y hasta que les saque la guita a los grandes terratenientes de la pampa húmeda como sueña, va a tener poco y nada para gastar en su propaganda estilo CGT. De todos modos, está en la misma que el Frente de Izquierda y deberá usar la que le da el Estado por la cantidad de votos que sacaron en la elección anterior, la que reparte la Justicia electoral en partes iguales a todos los precandidatos y la que reciben para hacer las boletas. Y la usarán como puedan y/o harán actos o cortarán las calles para lograr mayor visibilidad. Algunos usarán muy bien sus influencias o contactos o las redes sociales o a sus fiscales o harán videos creativos como los de Guillermo Moreno y Gabriel Solano ambos con la base musical de la misma cumbia “Te estás portando mal”.  Criticando al gobierno actual y a los mismos candidatos de siempre y mostrándose ellos como opción. No nos olvidemos que un diputado más o menos cobra 1 millón de pesos y muchos nombran asesores a los que le piden la plata de sus sueldo para financiarse y lo que es peor a militantes a los que le consiguen trabajo en alguna repartición pública y también le sacan una parte. O el negocio de quedarse con guita de los planes, que según la derecha hacen dirigentes sociales como Belliboni o Juan Grabois, y ellos aseguran que los beneficiarios lo hacen a conciencia para sostener la organización. Lo mismo pasa en algunos centros de estudiantes en las universidades públicas. Y el precandidato a presidente Gabriel Solano, hoy legislador por la Ciudad de Buenos Aires, dice cobrar el sueldo de un docente universitario y el resto lo dona al Partido Obrero. Y el tema de las donaciones siempre es dudoso porque muchos blanquean plata así o invierten a futuro. O por qué creen que tiene el quilombo que tiene Santi Maratea con la colecta que hizo para Independiente. Porque suponen que hay guita sucia y no declarada entre los donantes. Pero lo de la izquierda son monedas. Y lo mismo dicen Nicolás del Caño, Myriam Bregman, Manuela Castañeira, etc. Si hasta está el ejemplo de Luis Zamora que después de ser diputado nacional, al dejar el cargo, pudiendo recibir una jubilación de privilegio, renunció a hacerlo. Porque decía que todavía era joven y podía trabajar. No es el caso de millonarios como Mauricio Macri o Cristina Fernández de Kirchner que sí las cobran. Y supongo que también la cobrará Alberto Fernández cuando se vaya. Y el que venga diga que hay que pagar con nuestros sueldos el quilombo que deje el anterior y licue los salarios y precios con ajuste, mala praxis o inflación. Pero la mayoría de nosotros cobramos menos de 200.000 pesos y no sé cómo vamos a pagarlo. Y ellos cobran 1 millón.

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