Lunes, enero 02, 2023 6:07 AM Día dos Canallas..
Hoy el tiempo se ensañó contra nuestros cuerpos cansados y sucios. La lluvia caía con furia inusitada. Y sonaba diferente sobre nuestros techos de cartón, de plástico de lata. Afuera llueve y aquí adentro de la casa creo que más. La lluvia cae y los niños lloran de hambre.
1. En este segundo día las campanas de las viejas iglesias chillaban.
2. Los parlantes dejaban salir algo así como un sonido convocando a la gente
3. La mujer calentó una poca de agua, raspó el tarro de café, hizo magia y logro recolectar algo de ese oloroso polvo que de repente lo inundó todo.
4. La lluvia caía con rabia y sus gotas parecían querer atravesar nuestro techos de cartón, lata, plástico.
5. Miró a un lado de la pequeñísima sala.
6. Se arrodilló y cubrió aquel pequeño cuerpo aún tendido entre los cartones.
7. Le beso. -vuelvo en un rato- le dijo al oído.
8. ¿A dónde vas? preguntó el hombre aún echado y embojotado en el destartalado Chinchorro.
9. El agua sonaba seca al estrellarse con furia sobre el techo de plástico. .vas a misa volvió a preguntar.
10. Bombas de agua se formaban en el techo de plástico negro reforzado con el pensamiento de que aguanta, aguanta.
11. Y con la mano montada sobre un pequeñito banco de plástico recuperado del basurero empujaba con extrema delicadeza hacia arriba el plástico y el agua era desalojada.
12. Así lo hizo sobre las 25 bolsas de agua formadas.
13. A la calle – dijo con rabia a ver si encuentro a Dios que hace demasiado tiempo que no sabemos de él.
14. Anda a misa, como todos y te paras allí a la entrada, en las escalinatas y pides a la gente. Esa iglesia es de ricos. Le dijo él a ella.
15. Ah sí. Te dan unas monedas pero después te la sacan cuando vas a sus negocios a comprar porque antes de salir a misa aumentaron los precios de los productos
16. . Las recuperan cuando aumentan el precio de los medicamentos o cuando acaparan y crean sensación de escasez y los precios suben.
17. Y los ví entrar a la iglesia este domingo
18. Y vieron a los pobres, a los olvidados de la tierra en la entrada, en las escalinatas con sus esperanzas hechas trizas
19. Sacaron sus pañuelos y simulando secarse el sudor de la cara se taparon la nariz, volvieron el rostro hacia el otro lado y apuraron el paso.
Rodolfo Sifontes Lara Recife Estado de Pernambuço Brasil 02 de Enero de 20
