Carta abierta de Reneé Tosi al mejor delator  

Carta abierta de Reneé Tosi al mejor delator  

Leí. Carta al estilo Rodolfo Walsh. Pensé ¿cómo hacer justicia a su nombre? ¿qué comunicar?

Pues su historia de vida, además de sorprendente, versátil e intensa es un ejemplo de

autenticidad.

Carta al estilo … vinieron muchas palabras a mi mente. Corrupción, remate, asesinato,

avaricia, hambre, injusticia, desempleo, inflación, humanidad, denuncia, vocación y coraje.

Pero una de las palabras resonó con más fuerza en mi interior, vocación. Hoy, que muchos de

los articulistas y reporteros de la información tienen sólo un signo por delante de sus narices

para decir la “verdad” y que desdeñan el coraje porque ya no les hace falta.

Escribir e informar ¿por azar? ¿por tibieza? ¿por dinero? Lo tuyo fue escribir porque no

quedaba otra, había que materializar por medio de las letras la atrocidad, los crímenes de lesa

humanidad, el hambre y el pellejo, y vos lo hiciste, con la altura del gran escritor de relatos

policiales, el periodista de raza y la empatía del benigno. Te imagino frente a tu máquina de

escribir con los dedos crispados de impotencia escribiendo a la maquiavélica Junta Militar,

sabiendo que al mismo tiempo redactabas tu sentencia de muerte y un himno a la valentía.

Entonces, yo aquí frente a mi netbook deseo que eso del “cielo” sea una mentira y que, si hay

vida en el más allá, no puedas ver a los sicarios de la palabra, a los maestros de la

tergiversación, a los juglares que diseñan titulares. ¡Ojalá que no! Porque acá con democracia

y todo, el hambre sigue azotando a la infancia y que a los sobrevivientes de la desnutrición

los espera la fiesta de Halloween, que la muerte y la avaricia están de fiesta y que, el coraje y

la supervivencia persisten en manos del pueblo, como siempre. Un pueblo que se reinventa

y no baja los brazos jamás.

Desde Florencio Varela, Buenos Aires, Argentina