Despertar de ojos grises
sonriendo la vida
el puño bien alto,
las piernas arriba,
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Como mariposa
buscaba la sombra
de la despedida
días tristes del alma
un olor a alondra
mi mano lavanda
enyoyada en su pecho
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Parecía
que los brazos de la noche
abanicaban su llanto
Nos reímos como locos
-cuanto, cuando-
soñando acunados
mañanas de día
Ojazos de cielo
despegando,
mirando
-tanto. cuanto-
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Golpeó la puerta
un perfume que queda,
con fragancia a lilas
Sillón de mimbre
que cruje,
te hamaca dormida
Del sol cae de pronto
una margarita
en tu body de flores
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Hojas de viento
quebrándose
marcan mi sendero
de huellas visibles
y solté las riendas
de mis ganas perdidas
La boca de viento
arrancó el eructo
-por fin, al fin-
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
En una mañana
repleta de flores
En el corazón verano
del otoño fresco
En el viento que sopla
como mariposa
Ahora es cuando
necesito me escuches
-ahora es cuando
y es ahora cuando-
lo que quiero decirte
para que no le hagas caso,
en tal caso,
a lo que quiero que oigas
Escuchá otras voces,
aunque suene más cálida
mi voz conocida
Mi voz dolorosa
y una flor guardada
en un ojal que encandila
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Sentí viajar
sus ojos grises
en los míos marrones
y es cercano el otoño
y te acarician mis besos
como babas de fuego
Hojas secas del viento
que se van chocando
contra las ventanas
y las abren
Inclinado a su cuna
lanzo mis únicas redes
para pescar la ola
de tus ojos de mares
No te pido que cierres
mis ojos profundos
todavía
Se parecen tus pies
a los caracoles blancos,
a los berberechos
que juntaba en la playa
Ha venido a dormirte
un volado de sombra
verde agua bordado
volando despacio
como mariposa
Me guardé las ganas
de abrazarte de nuevo
-si igual habrá otras-
y tembló en la noche
su vestido de besos
mientras te dormías
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Nadie nos vio tan cerca
con las manos unidas
en que la noche de azules
se escondía del mundo
A veces a suerte,
como una moneda
de su “patria o muerte”
a lo cubana
que en la billetera guardaba
Un pedazo de sol
en mi andar retenía
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Yo te recordaba
con mi alma apretada
antes que nacieras
de esa tristeza amarga
que escondo y conoces
Porque me viene ahora
tanto amor de golpe
cuando me acerco a mirarte,
a buscarte,
a levantarte,
a dormirte,
a acariciarte,
-cuando, cuanto-
cuando me lo pidas
y te quedas dormida
en mis ojos mirándote
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Como fuera del cielo
tu mar de ojos grises
eclipsó mi luna
Vendaval de noche
enterró las campanas
de mi desconsuelo
Pájaros que revolotean
las amarillas flores
como mariposa
-otra vez-
tirando al olvido,
la soledad envuelta
de sueño y silencio
se fueron
como un racimo de uvas
entre mis brazos llenos
cada día se fueron
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
sobre mi sonrisa
Se fueron los pájaros
y con ellos el viento
Me acompañarás
hasta el último grito
de amor que te llame
y ya no respondas
y ya no me busques
Sin embargo correrá siempre
mi amor clandestino
por tus ojos hoy grises
Porque nos habremos visto
tantas veces antes ,
tantas mañanas,
tantas tardes y noches
mirando la suerte
que nos toque vivir
y ya no dolerán tanto
las cosas que mires
-espero, deseo-
ni las mías
Mientras…
Se desviste la lluvia
de tu body de flores
Porque te tengo guardadas:
flores grises,
alondras,
lilas,
caracoles,
berberechos,
puños,
piernas,
libros,
monedas cubanas de su “patria o muerte”,
palabras no dichas,
miradas,
mimbre,
besos en los ojos,
mariposas,
viento,
sombras,
pájaros volados sobre mi cabeza,
bordados,
volados…. Verdes y fucsias
Poemas escritos con tu voz descalza
Despertar de ojos grises
sonriendo la vida
el puño bien alto,
las piernas arriba,
Una risa y un pedo
O dos
Una flor a escondidas
O tres,
O cuatro, o cinco…o seis
-cuantas-
siete, ocho, nueve
Tantas margaritas traía tu body
que ya no me acuerdo,
la flor que tenía,
guardada
para dártela,
donde la escondía