Me estoy transformando.De las cenizas ya soy fuego.Y del fuego mi piel y mi carne… Mi cuerpo nuevo lustroso en este verano incipiente y repleto.
Categoría: Poesía existencial
La poesía existencial se adscribe a la corriente conservadora tanto lírica como religiosa. Su tono es propio de un ser doliente y angustiado, que busca en su ser las respuestas necesarias para soportar la existencia y conseguir el equilibrio espiritual, que espera lograr plenamente en la vida.
Almas de invierno. Por María Margarita Pérez Vallejos
Oh andamiaje de la poesía, defiéndeme del verbo negro de las andanzas Cúbreme en tu follaje trémulo de frío Yo sabré calentar esta templanza con
Cerrar los ojos. Por Juan Botana
Miraba para arriba como buscando algo, queriendo seducir la vida con ojos color cielo, atrapando momentos en fotos, en poemas, en un lienzo, prendiendo linternas
César, poemas humanos. Por Adriana Petrigiano
El frío cordillerano le apretaba , aún hoy, cada hueso. Allá en Santiago de Chuco o en Trujillo, le dolía el hambre. Pero aquí, la
Argumento. Por María Elena Gómez
No hay argumento posiblepara este sentimientosencilloindescriptibleSe acabaron la palabrasquedaron mudasen mi bocaAñicos de perlasdentro de una conchaen el mar profundodónde duerme mi osadía.Cada célula de
Huir. Por María Elena Gómez
Y huiremos mañanaJunto al picaflorlos haremos ni bien comience el díaa escondidas de nuestra sombradejando nuestra historia de costadoporque te quiseme quisisteAhora desiertomar en calmadónde
Partida. Por María Elena Gómez
Escapando de vosdejé aislados mis recuerdosla gloria de un díafue pisada por míen aquella noche.Todo fue negrono lo entiendo todavíano lo haré nunca.Necesite irmelo hice,
Luz de oscuridad. Por María Elena Gómez
Las rosas se han dormido en tu pecho.Danzan las amapolas en tu piel.Te asombrás con este amanecer en el que recojo la sed de tu
Locura. Por María Elena Gómez
Burbujas mecánicas explotan en mi nariz.Se funcionan, vuelan.Son como un silbido en mi mente.CallopisoVuelvo a callar.Burbujas, brujasciento de ellasperfuman el airese estacionanluego vuelantoman las calles(La
Elegía. Por Miguel Hernández
(En Orihuela, su pueblo y el mío, seme ha muerto como del rayo Ramón Sijé,con quien tanto quería.) Yo quiero ser llorando el hortelanode la