Tiempo impiadoso
susurro, tristeza
mi imaginación se apacigua, silenciosa.
Hay melodías lejanas
que atrofian sentimientos
sin sonrisas de alcoba
que trasciendan ventanas de placer.
Mi alma se retuerce
en círculos concéntricos
de dolor sin grito.
Asesinos varados a la vera
de la jaula muestran dientes de dominio
Trago sin sabores de bruma,
no puedo expresar palabras ¡No puedo!.
Sólo escucho disparos, los niños duermen
escasean los momentos de tibieza.
Llueven deseos, los opaca la escollera.
Ni el agua quita mi sed,
sólo quepo en un ruido aterrador,
me enreda en un féretro infalible,
sólo el viento empolvado