Las rosas se han dormido en tu pecho.
Danzan las amapolas en tu piel.
Te asombrás con este amanecer en el que recojo la sed de tu boca en mi cuerpo.
somos uno
roca
mar profundo
agua negra
blanca
Tempestad
Viento huracanado
tus rosas sean despertado, la miel de tu pecho me la bebí
Anda vagabundo inmerso en la oscuridad de mi alma, sólo pude darte esta madrugada.
Llega el final
es de día
las amapolas dejaron de danzar.
Tu risa ha llegado al final
Yo me volví oscuridad.