Breve charla de Juan Botana en la Feria del Libro de Buenos Aires.
Hola a todos, todas. Presentar un libro, como “Sin ojos que los miren”, siempre es un hallazgo. Algo que se descubre a otros con la intención de mostrarlo. Como verán, en la tapa del libro hay un chico que mira para abajo y en ese no mirar a los ojos va el reclamo. Y el reclamo de un chico puede funcionar como la madre de todos los reclamos. Pero también ese mirar para abajo es poner el ojo donde falta y entonces las crónicas del libro hablan de amores no correspondidos, de personajes del tren, de la calle o del barrio, de chicas y chicos abusados, de vendedores ambulantes, de una anciana que vive a través de los cuidados, de militantes barriales, de la muerte, de un festival de poesía, de los wichis, de la relación de un hijo con su padre; pero siempre con una mirada tierna hacia el que no puede o no tiene. Porque la idea es democratizar la vida y buscando otra sensibilidad, más no sea a través de un libro, quizás podamos lograrlo.
