Varias de sus obras han llegado a grandes casas de subastas como Crhistie’s. En el listado también aparecen chilenos y mexicanos
Por Sofía Solórzano Cárdenas
El arte colombiano crece de la mano de grandes exponentes y es reconocido por plataformas como Mutual Art, en la que se realizan subastas, asesorías y críticas de arte. Su último ranking, de artistas destacados en Latinoamérica, por ejemplo, incluye a dos locales.
En primer lugar se ubica la pintora Ana Mercedes Hoyos, conocida durante su trayectoria artística por pintar bodegones. Uno de sus más populares se tituló “Porcelana del Caribe” que ha acumulado alto valor en la reventa. Otras de sus obras, han llegado a casas de subasta como Sotheby’s y Crhistie’s.
Mutual Art, además, destaca la influencia de Van Gogh en el arte de la colombiana, en cuanto a composición y combinación de colores, sin dejar de lado el ‘realismo mágico’ aplicado a los paisajes elegidos.
En segundo lugar se encuentra la chilena Cecilia Vicuña, conocida por su estilo creativo y de resistencia política. Es artista visual, poeta, cineasta y activista, con lo que cada una de las ramas en las que se desempeña entran en acción en sus obras.
La artista cuenta con exposiciones en el MoMA en Nueva York y el 11 de octubre llegará al Tate Modern de Londres. Además ha psado por otros como el Museo Solomon Guggenheim en la Gran Manzana, en el que se presentaron algunas de sus obras destacadas como La Noche (2009), una serie de 20 capítulos que fusiona poesía y dibujo, y Caracol Azul (Blue Snail) (2017).
El top tres lo cierra otra mujer. La argentina Sarah Grilo, conocida por sus pinturas de la época que han pasado desde la “abstracción geométrica” hasta un “expresionismo abstracto más gestual”, según destaca la plataforma. Obras como ‘Azul’ han logrado venderse en más de US$47.500.
Entre las exposiciones que resuenan se encuentran ‘El inconsciente urbano’, que estuvo en Nueva York, en 2018; ‘I. Acto de reencuentro’, con el que llegó a Madrid, España en 2020 y ‘Obras’, un compilado de su trayectoria entre 1963 y 2003 que estuvo también en Madrid en 2021.
El puesto cuatro lo alcanza el colombiano Fernando Botero, conocido, principalmente por sus ‘Gordas’ que han dado como resultado su propia corriente: el Boterismo. El artista ha logrado millonarias ventas con sus obras, entre esas, su escultura ‘Madre e Hijo’, por ejemplo, se subastó con una estimación de US$1.000 y US$1.5000 en Christie’s Nueva York.
Este año, Botero también salió a colación por la famosa paloma de la paz, que regaló al estado cuando se firmó el Acuerdo de Paz y que, este año, estuvo presente en la posesión presidencial. La estatua, que se encontraba en el Museo Nacional, ahora está en la Casa de Nariño.
Catalina Restrepo, directora de LAR School, explica que antes de adquirir cualquier tipo de arte hay que definir qué clase de comprador será: uno que lo hace por gusto o uno que piensa en la rentabilidad.
“Debo pensar en cuál es mi prioridad, si es por inversión, es decir, que los artistas que compro no me importa si me gusta o no, pero se van a valorizar con el tiempo y los puedo vender o si es más por la parte decorativa, que se vea bien en mi espacio, sin importar quién sea el artista”, comentó Restrepo.
Precisamente, la mexicana Aliza Nisenbaum, se ha convertido en una de las artistas latinas que destacan en el radar de expertos, coleccionistas y curiosos. Su trabajo se ha enfocado en la intimidad entre la obra y el artista y la humanización de los personajes.
Entre sus instalaciones destacan un mural que realizó en el metro de Brixton, Londres, en el que se basó en los tradicionales murales mexicanos. Asimismo, ha hecho otras intervenciones inspiradas en la pandemia, la clase trabajadora y los migrantes.