Juan Botana es escritor y licenciado en comunicación. Autor de libros, redactor de contenidos para el GCBA, organizador del Festival de Poesía y director de la web Carta abierta.
¿Quién es Juan Botana? ¿Cómo te definís en el terreno personal?
Un tipo común, con cierta capacidad de observación, algo de sensibilidad y cierto bagaje teórico que lo pongo a jugar al momento de hacer las cosas. Supongo, mucho más creativo en la escritura que en la vida. Me gusta escribir, leer, armar contenidos, ayudar. Soy comunicador social y como comunicador peleo por una comunicación democrática, que no rechace a nadie y abierta.
¿Cuándo despertó tu pasión por la escritura?
A los 15 años cuando me había enamorado de una chica y no me animaba a decírselo. Muchas de las cosas que escribo tienen que ver con cosas no dichas. Pero mi escritura más literaria volvió en el 2013 con el recuerdo de la muerte de mi padre y siguió y no paró desde el 2014 con el nacimiento de mi hija.
¿Qué te impulsa y qué se siente ser un “hacedor” constante, es parte de tu personalidad o de tu pasión?
No sé. Yo soy muy rutinario y a lo que me gusta le proporciono un método y alguna técnica. Hace unos años me interesa promocionar lo cultural, en especial la escritura creativa y los festivales de poesía. Yo fui a presentar un libro en un museo y me di cuenta que mucha gente quería participar y así empecé a gestionar los eventos. Un poco para que me conozcan a mí y mucho para que conozcan a otros que por alguna razón me interesan.
¿A dónde pretendés llegar con tu proyecto “Carta Abierta”?
Carta abierta es una web participativa, donde el que quiera puede opinar o expresar lo que le pasa o piensa a través de la escritura. Pero: ¿a dónde quiero llegar? Lo mismo que con los festivales. Yo quiero que la gente participe, pero no uno o dos, que lo haga todo el mundo de forma masiva.
También cantás… ¿Es un pasatiempo o te dedicás?
Ninguna de las dos. Canto a veces porque me gusta. Me gusta la música. Canté de joven en una banda de rock que se llamaba Art Decó y de chico me gustaba imitar cantantes, pero nada más.
¿Qué metas o sueños sentís que lograste en el 2024 y cuáles pretendés alcanzar en el año que recién comienza?
El 2024 fue el peor año de mi vida. Me separé después de 22 años y muchas de las cosas que pensaba sobre la vida, la familia, la pareja y mi hija tuve que repensarlas. Lo loco es que la relación con mi ex no se rompió se transformó en otra cosa. En la vida hay que saber aceptar, aunque duela. Una vez escribí un poema que se llama “El amor no es de nadie” es una especie de tesis sobre el amor que muchos valoran. Pero quizás nada de lo que haya dicho ahí fuera verdad o al menos no completa mi posición sobre el amor. Hoy creo que el amor evoluciona.
Pero en lo laboral y en lo cultural me fue bien. Quizás porque fue mi forma de escape. De encontrar un lugar de fantasía. En el 2025 intentaré que más gente participe de los festivales, que más personas publiquen en la web Carta abierta, voy a sacar un libro de poemas que se llamará “Flores plebeyas” y seguiré difundiendo mi obra donde pueda. Por suerte tengo un trabajo fijo que me permite hacer estas cosas.
Tengo ganas de volver a viajar mucho como lo hacía antes y de escribir una novela.