La esperanza trae equilibrio, buen humor. Deshecha la amargura, le da una nueva mirada a los problemas.
Ella es el camino. Siempre resistir e ir hacia delante.
Nunca se sabe cuanto va a durar el camino, pero que lo que pisemos sean rosas, no sus espinas.
Hay desilusión , siempre. Forma parte de la vida. Hay dolor siempre, forma parte de la vida.
¿Cómo se hace? No hay fórmulas, cada uno encuentra la propia.
Pero el creer que se puede, esa esperanza, es lo que hace que los sueños se cumplan.
Entonces vayamos por una vida personal y social más justa.
Eso que vimos en las calles por el mundial , sea a diario. Gente socorriendo a gente de la calle, alcanzándoles sus camisetas para que ellos sean parte del festejo.
¿Porque no regalar un pan dulce, carne o juguetes a la gente que está en situación de calles, porque no producir un milagro para ellos, es tanto pedir? No lo creo.
Seamos solidarios. La vida nos duele a todos, a unos más y a otros menos. Pero la rueda de pasar por lo malo y lo bueno nos toca a todos por igual. De una manera u otra.
Seamos humanos. Este es mi deseo para el 2023.
Desde Ciudad de Buenos Aires, Argentina
