Bucaramanga, 14 de octubre de 2022
Sé que no esperabas esta carta; yo misma no sé porque me estoy escribiendo. Tal vez sea una manera de analizar lo positivo y negativo, que ha transcurrido en estos años.
El tiempo ha pasado es verdad; tu cabello negro está pintado con hebras de plata; pero tu corazón sigue vivo, joven, lleno de ilusiones y de amor.
El cuerpo ha perdido sus medidas casi perfectas y la piel su lozanía y frescura, pero sin embargo tus ojos siguen viendo las cosas de un color hermoso y reflejan amor hacia los demás.
Las cosas no han sido fácil… muchas veces tienes miedo, tienes ira y rabia, tienes desilusiones y el despedir seres amados siempre es muy difícil, pero sabes que ellos no se van del todo, quedan para siempre en el corazón.
Muchos sueños se quedaron en el camino por cumplir; pero no dejaste llenar de nostalgia ni de tristeza; quizás mañana alguno de ellos se hagan realidad y otros simplemente permanezcan dormidos para siempre.
Mírate, mírate ahí frente a la vida: con la piel marchita, pero el alma llena de alegría y de gozo. No importa que muchos pregunten que porqué hiciste esto, que porque no hiciste aquello otro… fue tu decisión; simplemente hay muchas cosas que para los demás son importante, pero para ti no lo son. Vives soñando en ese tu mundo raro, ese mundo donde sin lugar a duda eres feliz y por lo tanto yo también lo soy.
Algunos te dicen que lo que escribes no es poesía; no importa… es tu sentir, es el sentir de tu alma, de tus sentimientos, de tu experiencia de tu vida, de los sueños e ilusiones que quieren salir de su letargo; sencillamente son esas mariposas que al fin abandonan su capullo y vuelan, vuelan libremente de corazón en corazón, de alma en alma, con algo de magia de la misma vida; dejando estela en el corazón de algunos…
Sí, mi querida amiga, mi querida yo, sigue así, siendo tú misma, con tus cualidades y defectos, no eres perfecta porque eres humana…
Sigue adelante con tus sueños, con tus ilusiones, con todo lo que te lleva a ser feliz en ese mundo raro, donde eres tú misma, donde soy yo misma… donde eres y soy feliz, a pesar de todos y de todo.
Con cariño,
Isbelia
Desde Bucamaranga, Colombia
