Dejé de hablar de candidaturas para hablar de candidatos. Macri aprendió a ser político cuando dejó de ser presidente y se sacó la foto con Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta como si fuera el papá que une a los hermanos y no tanto. En la foto se coló también Grindetti. Alberto Fernández se comporta como si ya no fuera presidente y Massa que si cree, puede ser que no gane en octubre y si gana en octubre como viene la cosa es muy difícil que lo sea en diciembre. Pero tiene chanches. Si lo peor que pasó fue el resultado de las PASO y la devaluación y el miedo a Milei lo mantiene en carrera. El lunes había gente con cara de susto y el resto. Y el resto había votado a Milei sin escucharlo. Porque si lo escuchás, salvo lo de la casta no dice una verdad que no pueda ser refutada. Lo de liberalismo versus socialismo o comunismo, como dice, está viejo. Los sistemas políticos hoy son mixtos. Incluso en los Estados Unidos se interviene la economía todo el tiempo; si no los chinos, a los que él califica de comunistas, se los comerían crudos en el libre mercado. Porque tienen la mayor y mejor industria, precios competitivos, son millones comprando y poseen un Estado bélico que negocia voluntades con importaciones, inversiones, engrosamiento de reservas de países endeudados, yuanes y armas. A Patricia Bullrich para cambio profundo en vez de cambio (Horacio) le alcanzaba, pero si el reclamo de terminar con la inseguridad no la ayuda y la discusión pasa a ser económica están mejor posicionados para darla Milei (sin responsabilidad de gobierno y que promete cosas que no va a poder hacer) y Massa timoneando el Titanic. Lo más lógico es que Milei y Bullrich se eliminen entre sí porque pelean por el mismo electorado. Y aunque les parezca mentira Massa competía más con Larreta por el voto de un ciudadano más moderado que con Grabois y Horacio con Patus. Y la clave estará en los que no fueron a votar si van, si alguno o alguna que votó a Milei creyendo que no iba a ganar cambia el sufragio o a quién irán los votos de Horacio, o si Massa, Bullrich y Milei se llevan alguno de los votos de Bregman o Schiaretti y los cero como algo de los demás candidatos. A propósito a Schiaretti lo noto callado. Pero así sacó 6 por ciento. Y Bregman con Del Caño y Solano ya están pensando como plantársele a Milei y mientras tanto los ajustes los hace Massa. En el fútbol, Messi va por otro título, Boca ganó, Cavani hizo su primer gol, Racing empató y Medina fue a trabar con la cabeza. En la política, los del Conicet salen a decir que no lo cierren, cuando eso todavía no pasó. El Papa Francisco creó un organismo por los derechos sociales en el Vaticano. La Ciudad no utilizará el voto electrónico en octubre. El dólar blue cayó su cotización: ahora vale sólo 720 pesos. En Brasil, Bolsonaro parece que vendió joyas y la sociedad está conmocionada por el asesinato de la líder quilombola María Bernabete Pacífico. En San Pedro, hallaron asesinada y en un tacho de basura a una joven que estaba desaparecida, tanto que a los medios les cuesta decir que se trata de Naiara Durán. Elisa Carrió renunció a su candidatura al Parlasur. Jorge Lanata se burla del gobierno y dice que la devaluación le quedó corta, anticipa otro ajuste, dice que Kicillof implora que el miedo le gane a la bronca y que éste es el nuevo slogan de la campaña K. Diana Mondino, eventual canciller de Milei ya dijo a cuántos empleados de la gestión Cafiero quiere echar. Los medios ya hablan de la reforma laboral de Milei: indemnizaciones, paritarias y el golpe que prepara contra los gremios y parece que Miguel Ángel Punte, ex número dos de Triaca en la gestión de Cambiemos durante el gobierno de Macri es el cerebro de las iniciativas que impulsa La Libertad Avanza y dice: “la uberización del trabajo es inevitable”. Y eso después de la pandemia y la falta de trabajo estable y en blanco puede ser, pero las condiciones laborales, la quita de derechos laborales y los bajos salarios hacen que una familia no pueda irse de vacaciones con sus hijos, comprarles un regalo para el Día de la Niñez, descansar, tener horas libres para ir al médico o un trámite, poder cuidar a un familiar si se enferma o es viejo y estudiar, amar o recrearse. Y ahora en vez de candidatos vendrá la pelea de técnicos –porque siempre detrás de los Cavani, Messi, Medina, Bolsonaro o Milei hay un tipo que piensa- que ya trabajaron durante otros gobiernos y también fracasaron. Siempre en las elecciones aparecían economistas explicando la política, pero ahora aparecen estos cuadros dudosos que se hacen los genios. Así que en los meses que quedan espero que a este gobierno le vaya bien. Porque gane quien gane lo que viene es derecha. Porque la batalla ideológica que siempre dio el peronismo sobre lo público hoy no la está dando por mala praxis. Y para liberales van a elegir a otros. Y ganaran los que miran a los demás con desprecio aferrándose a lo poco que tienen diciendo que es por merecimiento propio. Y un médico del Conicet me dijo que todas las gripes de ahora son Covid.
