La vida de un pueblo. Por Juan Botana

La vida de un pueblo. Por Juan Botana

Si todos se ponen a pensar.
La vida es más larga cada vez.
Te apuesto mi vida una vez más.
Aquí no hay durante ni después
Fernando Cabrera

La vida de un pueblo 
se parece a la mía. 
Una vida tranquila.
De mochila al hombro, 
de salir a la ruta 
y escribir la vida. 

Un perro que ladra, 
la gente que pasa, 
la iglesia y su esquina. 
Un banco de plaza, 
El centro cerrado, 
se pasan los días. 

La vida de un pueblo 
se parece a la mía. 
Una vida distinta. 
De mate en la mano, 
de salir a la puerta 
y escuchar que silban. 

Un tren que no sale, 
la barrera baja, 
la siesta de tarde, 
un cine teatro, 
la murga que ensaya, 
¡Buen día vecina! 

La vida un pueblo 
se parece a la mía. 
De calle empedrada 
y sin autopista. 
De puertas abiertas, 
de vuelta al trabajo 
y otra vez sin prisa. 

Una comida rica, 
el amor para siempre, 
el sol que ilumina. 
De andar casi ciego, 
como el perro del Cholo, 
que ve si lo miran.