Juan Botana leyendo “El amor no es de nadie” en el Jardín Botánico, Av. Santa Fe 3951, CABA.
El amor
no se hace
en minutos.
Lleva tiempo.
El amor
es
un suspiro cada tanto,
no siempre.
El amor
es
paciencia,
tolerancia
y escuchar.
El amor
es
perder.
El amor
a menudo
se queja,
reclama,
patalea,
grita,
calla,
llora,
cede.
Al amor
no se lo enamora.
Es el amor
el que te enamora
a vos.
El amor
no se busca,
ni se encuentra,
ni se merece.
El amor
se va.
El amor
nos cree al principio
o eso pareciera.
Lo difícil es
que te crea
más tarde,
el resto de los días,
después…
Cuidarlo.
Como pasto
que le cuesta crecer
cuando no llueve,
como jazmín de cielo
en noviembre
al que no siempre
las flores
le brotan
de una vez.
El amor
es que te esperen
y esperar,
sin flores en la mano,
sin llanto que te ampare,
sin sueños que se cumplan.
Los plazos del otro,
los momentos del otro.
El deseo del otro.
Aunque a veces
concuerde con el tuyo
y otras no.
Hay personas
que aman con locura
y sin embargo
nadie las quiere.
Y otras que hacemos
las cosas mal
y las repetimos
hasta el cansancio.
Y somos amadas
y mucho.
¡Por suerte!
El amor
es
tener un proyecto
común
por pequeño que sea.
El amor
no es
saber lo que hace el otro,
ni imaginarlo,
ni siquiera intentarlo,
ni suponerlo,
ni saber.
El amor
no es
control.
Ni parecerse,
ni coincidir,
ni conocerse,
ni ser el uno para el otro,
ni tu media naranja,
ni tu parte de qué.
El amor
no es tuyo,
ni mío,
ni de aquel,
ni del anterior,
ni de nadie.
El amor
no es
de nadie.
Si quisiéramos conocer
todas las acciones
de la persona amada
todo el tiempo,
la vida sería
un suplicio.
El amor
no es posible
y olvidé las comillas
deliberadamente
si no existe
un secreto,
decía Kundera.
Y tantos otros
lo repetimos
sin entender.
El amor
no es posible
si no vislumbra
una hazaña,
más no sea
a lo lejos.
El amor
es
una mentira.
A la que nos aferramos,
le creemos.
Simplemente
porque queremos
creer.
El amor
te confunde.
Te ciega.
Te abraza.
Te gusta.
Te disfraza.
Te ensordece.
Te deja,
con las ganas
y te suelta.
Como pájaro sin pan
en el deseo.