“Los árboles caídos también son el bosque” de Alejandra Kamiya y “Varia Imaginación” de Sylvia Molloy. Por Nuria Gómez Videla

“Los árboles caídos también son el bosque” de Alejandra Kamiya y “Varia Imaginación” de Sylvia Molloy. Por Nuria Gómez Videla

Un libro corto

Me había perdido. Estaba buscando qué leer de todo lo que tengo para leer. ¿Algo feliz? No, no estoy de ánimo. ¿Algo simple? Bueno, suena mejor. Y entonces divido el tiempo, parto la búsqueda en dos y entran estos libritos o librazos que vienen a mi encuentro, me agarran de la mano y me llevan. Allá vamos:

“Los árboles caídos también son el bosque”, de Alejandra Kamiya, de padre japonés y madre argentina, ofrece 12 cuentos sofisticados, elevados, que dejan la sospecha de ser autobiográficos o no, cruzando las dos culturas que lleva en la sangre la autora y atravesados de poesía, olores, lugares que se adosan al lector cuando parece que nada puede suceder. Armé un compilado de frases que me quedaron girando en la cabeza y en el corazón: “Tenemos muchas vidas como caminos, si no las andamos, les crecen los yuyos y las tapan”, “Se puede morir de tristeza y de amor también”, “Lo que te une es la separación”, “A la llanura se sale al bosque se entra”, “Eso que no tiene nombre, existe”, “Lo que se anuncia en silencio se anuncia con más fuerza”, “Parto, también es el acto de llegar a la vida”, “Ahora sé que lo que yo necesitaba en ese momento eran palabras”

📕Los árboles caídos también son el bosque
🖊 Alejandra Kamiya
⚙️ Bajo la Luna
📖 125 páginas
⏰ Leer sin reloj, desordenados.
💌 “Arroz” y “Partir” son sublimes.
📍Gracias @soniadira por este préstamo lleno de ✨✨

“Varia Imaginación”, de Sylvia Molloy, gran escritora argentina que descubrí hace poco tiempo y que se ha vuelto un vicio de los buenos. Acá reúne relatos cortísimos de su vida, una autobiografía dividida en 4 partes: 1/Familia 2/Viaje 3/Citas 4/Disrupción. Cualquier texto de Molloy es bello, avanza simple, como si todo fuera un diálogo entre dos personas que se cuentan algo…. cuando entre ellas fluyen las palabras fluye todo. Escribe con imaginación y la usa como un recurso cómico que me hizo sonreír a veces. Molloy es positiva y también negativa pero nunca nada. Dicen que es un libro inolvidable, que es un clásico, yo diría, como pasa con los vicios, dame más, quizá en este momento sea necesario.

📖 73 páginas
⏰ Un desayuno
💌 “Saber de madre” y “Amor de hermanas” hay que leerlos con precaución.

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