¡Hola Javier! Hace mucho que no te escribo y me dieron ganas de hacerlo hoy. Un poco porque es 9 de julio, día de la independencia, no trabajo y tengo tiempo; y otro poco porque te vi firmando un pacto con gobernadores en Tucumán. Aquel Pacto de Mayo que querías hacer el 25 y recién pudiste hacer hoy.
Pero no te preocupes por eso. Todos tenemos algo que postergamos y decimos que vamos a hacerlo y quién sabe si lo vamos a hacer o cumplir algún día.
Lástima que no pude ir. Porque me hubiera encantado ver a Mauricio Macri y a Adolfo Rodríguez Saá muertos de frío en la puerta de la casita de Tucumán, porque no los dejaste entrar. ¿Y para qué? Si a esos dos vagos nunca les gusto laburar y mucho menos cumplir pactos. Mauricio firmó un acuerdo con el Fondo que nos endeudó de por vida y ahí lo ves abandonando el torneo de Wimbledon para volver a la Argentina y recibir tu destrato. Y al Adolfo, que fue presidente una semana nada más, dijo que no iba a pagar la deuda externa, el congreso lo aplaudió, lanzó un plan de 1 millón de puestos de trabajo que eran planes o se convirtieron luego gracias a Duhalde y a la ley de ingreso universal que propuso Carrió. Y todavía los estamos manteniendo con distintos nombres y nunca pudimos convertirlos en empleo genuino. Después le echaron la culpa a Cristina y el loco se olvidó.
¿Pero eso no es culpa tuya? Tampoco podemos adjudicarte todos los males de este país a vos, que estás relanzando la segunda parte de tu gestión de gobierno y sentando las bases para una nueva Argentina. Algo así como un Juan Bautista Alberdi moderno. ¿Quién diría? De panelista de tele a esto. Aunque un amigo mío dice que siempre fuiste rico, que nunca laburaste y que te puso ahí la corporación política, no la económica como afirma Myriam Bregman. Tampoco que sos una reacción patriarcal, machista y conservadora ante el avance de las mujeres y la década ganada, que en la Argentina fue hace un montón.
Porque ahora los chicos leen mangas agresivos, los adultos piensan solo en su libertad, desaparecen a Loan, y creen que si al otro le va mal es porque no quiere esforzarse o porque no se lo ganó. Una especie de selección natural que dejará vivos a los mejores.
Y a veces pienso que vos no le ganaste al peronismo. Que el peronismo se borró y quería que vos hicieras este ajuste brutal y después vengan ellos o alguna opción más de centro diciendo que va a arreglar el desastre que dejaste vos. Y, así las cosas.
Ayer lo escuché al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, diciendo que apoyaba a este pacto para que vengan inversiones. ¿Y desde cuando si vienen inversiones y no les cobran impuestos van a beneficiar al país? Se van a beneficiar ellos y cuando no tengan la ganancia que quieren se van. Acá no tiene que venir nadie, tenemos que juntarnos nosotros y arreglar el país. Y si hay que decirle al Fondo que espere para cobrar, tendrá que esperar. Y si hay que decirles a las grandes fortunas de la Argentina que tienen que colaborar, tendrán que colaborar. Y si la gente tiene que trabajar, tendrá que trabajar. Pero después se la tiene que llevar a la casa. Para alimentar a sus hijos, ser felices, irse de vacaciones, etc. Y las escuelas tienen que funcionar. Y los hospitales tienen que atender. Y el transporte tiene que andar. Y los recursos naturales tienen que quedar en la Argentina. ¿O por qué te crees que un 9 de julio se festeja el día de la independencia?
Y en vez de esperar que venga la guita de afuera tendremos que generarla nosotros. Porque pedir plata es fácil. Cagar a los jubilados y estatales también. Vender las empresas nacionales ni te digo. Ahorcar de impuestos a los comerciantes, pequeños empresarios y al campo mucho más. Mientras los grandes se la llevan.
Y si todavía te quedó el contacto de alguno de los 18 gobernadores que firmaron el pacto a la media noche para que no los vean. Mandales un whatsapp hoy o mañana para confirmar. No sea cosa que pasado te bloqueen, porque se dieron cuenta que firmaron un pacto a espaldas de la gente. Porque muchos pueden haberte votado a vos para esto. Pero a todos los demás no. Si hasta la vicepresidenta Victoria Villarroel no quiso ir a tu convite. Parece que no le llegó la invitación por redes sociales. Ahora que todo se ve en las pantallas y creemos que nos quiere gente que nunca nos vio.
Estoy convencida de lo mismo, lo están dejando hacer cosas brutales para no cargarse el costo político y que después venga el peronismo a arreglar todo. Eterno retorno.
Hola Yane. Yo convencido no estoy, pero es probable que pase. Te mando un abrazo inmenso.