¡Hola Javier! La política no es un show o al menos no lo era. Yo no sé a quién le gusta esto. Ni siquiera entiendo a quienes te votaron. Aunque si a los que no querían votar a los anteriores y no hicieron la suficiente fuerza por una mejor opción.
Lo cierto es que ayer al estilo Rodrigo o Carlos Monzón tuviste tu Luna Park y lo llenaste de gente que te apoya sin saber por qué. Como aquellos que siguen personas en las redes sociales y no saben ni quienes son y se piensan que son amigos.
Y estoy sarcástico como diría mi hija. Pero ayer caminaste eufórico por el escenario del Luna y agitaste tus brazos sin creer lo que estabas viendo. ¿O sí? Tus ojos parecían menos vidriosos que otros días. En los que pagabas para ser panelista de tele o pedías por favor que te inviten. Y aunque hoy están arrepentidos Cúneo y Fantino lo hicieron. Y hasta Macri que te ayudó para que ganes el balotaje hoy quiere separarse de vos en un encuentro del PRO. Y Fátima ya no se acuerda de tus besos o poco. Porque vos estás enamorado de vos.
Cuando era adolescente en el secundario antes que volviera la democracia y ganara Alfonsín nos hacían leer las plataformas de los partidos y por entonces creíamos que para ser presidente había que haber sido un diputado o senador destacado y si fuiste gobernador mejor. Por eso de tener experiencia de gobierno. Pero vos la tenés en las redes sociales, en los medios pagos, en los encuentros de fachos en España al estilo VOX y en las mesas de La Libertad Avanza que ahora pone tu hermana Karina con la intención de tener un armado propio para las elecciones del año que viene. Y así no tener que pedirle de nuevo el sello partidario a Victoria Villarruel o a cuanto partido provincial del interior del país te lo dio. Porque los favores se devuelven y vos no le querés pagar a nadie, si no tenés plata.
Al Fondo le pagas con la plata que te giran ellos para que les pagues y te le dan por hacer mal las cuentas. Algo así como un contador. A los jubilados, estatales, docentes y policías les bajaste los sueldos o los echaste. Y a lo mejor con el reclamo salarial de Misiones la gente se de cuenta que mucho de la tarea que hacían es necesaria y apoyan el reclamo. O se dan cuenta que la plata a ellos tampoco le alcanza y le hacen el reclamo que deberían a su empleador.
Pero vos cantabas el tema de La Renga con la letra cambiada sin importarte el aumento de la pobreza, el derrumbe de la actividad económica, la suba del dólar paralelo, la reciente inundación en Concordia, el hambre de miles o el aumento de la conflictividad social en Misiones. Nada iba a empeñar tu noche. En la que además presentabas un libro llamado “Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica” y al hacerlo desplegaste tu clásico discurso anticasta que tanto te funcionó: “El problema no es la gente, el problema son los políticos”, y defendiste una vez más el libre mercado extremo: “El único monopolio malo es cuando el monarca o el señor feudal le daba a una empresa la potestad para hacer la única que vendiera un producto en ese lugar y si alguien violaba eso le caía con el Estado encima. El problema es malo cuando el Estado está en el medio. Por lo tanto, el problema sigue siendo el maldito Estado”. Y hasta atacaste a quienes defienden el aborto legal, seguro y gratuito: “Es una agenda que tiene más de tres mil años y es una agenda totalmente asesina”.
Cuando el asesino sos vos, dejando si atención a millones de personas en hospitales, colegios, planes o comedores. Sin trabajo a otros o con sueldos de hambre a otros miles por una inflación desatada que provocaste vos. Y hoy muchos somos pobres con trabajo y en los trabajos nos asustan que podemos perderlo o nos suman horas y obligaciones con menos derechos.
Y decí que la dirigencia política argentina o está dormida, o es cómplice, o continúa en estado de shock desde que sos presidente. Y rescato al “Chipi” Castillo y a Myriam que gritaron como locos para que no salga la ley Bases, que a decir verdad a vos te importa un pito si gobernás por DNU. Como te importa un comino que España retire a su embajadora por tu pelea con Pedro Sánchez. Si en la pelea, aunque pierdas, te sentís ganador.
Y quizás por eso hiciste tu acto en el Luna, para sentirte un boxeador. Pero tené cuidado que en la vida siempre hay uno más fuerte o más rápido que vos. Y cuando le vendas todo lo que puedas a cuatro empresarios extranjeros, los de acá se van a enojar y como te pusieron te sacan. Y no vas a caer solo por tu inoperancia como dice Moreno; tampoco te van a sacar los muchachos de la CGT, absolutamente desprestigiados; muchos menos los que iban a salir si tocaban a Cristina, porque no salió ninguno.
Por el desastre que estás haciendo al desfinanciar la salud, la educación, la ciencia, los recursos naturales y del Estado, y la cultura; un día en vez de escribirte esta carta, me acerco a la Casa Rosada y te saco yo.
