El crimen de Umma, la pequeña de tan solo 9 años, genera una gran tristeza y dolor en toda la sociedad, pero también despertó una serie de pedidos de justicia y seguridad.
Querida Umma:
Hoy me siento con el corazón pesado y lleno de tristeza al pensar en lo injusto e incomprensible de lo que te ha sucedido. En solo nueve años de vida, habías llenado el mundo que te rodeaba de sonrisas, alegría y esperanza. Ahora, tu luz se apagó prematuramente, dejando un vacío irremplazable en los corazones de quienes te conocieron. Es difícil encontrar las palabras adecuadas para expresar el dolor que siento al enterarme de tu trágico final.
La vida es un regalo valioso
A tu corta edad, te merecías tener la oportunidad de explorar, aprender y crecer en un ambiente seguro y lleno de amor. Mi corazón se rompe al pensar en todo lo que te han arrebatado de forma injusta y violenta. Pero quiero que sepas que tu memoria vivirá siempre en nuestros corazones.
Aunque no estés físicamente presente, tu espíritu y tu amor perdurarán en la sonrisa de los que te amaron, en los recuerdos compartidos y en el inmenso impacto que dejaste en quienes tuvieron el privilegio de conocerte. Deseo que encuentres paz en tus nuevos caminos y que nunca olvides lo mucho que has sido amada.
Aunque la vida presente muchos desafíos que no podemos entender, prometo luchar por un mundo en el que ningún niño tenga que enfrentar el horror de un destino tan injusto como el tuyo. Buscaremos justicia.
Es tan terrible la pérdida de un hijo en nuestro Código Civil y Comercial, que no tiene un nombre para ese estado civil de la familia, como para el caso de que si muere el esposo será viudo o si fallece los padres serán huérfanos. Es cierto que asisten derechos a los padres y familiares de reclamar una indemnización por daños y perjuicios causado por la muerte de su hija o administrar los bienes si tuviere.
Los padres pueden buscar que se aplique la justicia para los homicidas, ya que ningún valor o indemnización es equivalente a la vida de Umma. Necesitamos que se aplique el rigor de la justicia y que se modifique el código penal para ser severos en las penas y que no salgan por puerta rotativa ningún asesino.
Descansa en paz, pequeña Umma
Tu vida fue corta, pero tu huella será eterna. Con amor y profundo pesar, y mis condolencias.
* María Alejandra Muchart, abogada, magister. presidente Partido Demócrata Cristiano- CABA.
Fuente: https://www.mdzol.com